Sentimiento festivo en un barrio tan pequeño
Dec 15, 2016
El Bo. De la Concepción se vistió de fiesta
Memoria y alegría en honor a la Inmaculada Concepción
Por Juan Alberto Vega Barreto [Albar Says] para www.Tepotzotlánpueblomagico.org
“Declaramos, pronunciamos y definimos que la doctrina que sostiene que la Santísima Virgen María, en el primer instante de su concepción, fue por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente en previsión de los méritos de Cristo Jesús, Salvador del género humano, preservada inmune de toda mancha de culpa original, ha sido revelada por Dios, por tanto, debe ser firme y constantemente creída por todos los fieles.” Dogma proclamado por el Papa Pío IX, el 8 de diciembre de 1854, en la Bula Ineffabilis Deus.
Uno de los barrios más pintorescos de todo Tepotzotlán es el que pertenece a Santiago Cuautlalpan y en el que se encuentra enclavado junto a una hacienda en un pequeño valle, justo debajo de una presa edificada a principios del siglo XX. La hacienda data del siglo XVIIIy fue edificada por los sacerdotes Jesuitas, desde entonces cautiva por sus detalles artísticos, por su arquitectura, por la familiaridad de los que residen en este terruño y sobre todo por las tradiciones que año con año sigue alimentando el pueblo.
Una de las advocaciones más promovidas por la fe católica es a la Inmaculada Concepción, misma que suele ser invocada también bajo el nombre de la purísima. Históricamente podemos hablar que el primero en traer esta devoción al territorio novohispano fue Hernán Cortes, mismo que trajo un estandarte con la virgen pura y sin pecado, misma a la que le fue consagrado el nuevo territorio en tiempos posteriores. Es por ello que de forma rápida y pacífica, fue como gano su propio espacio de fe y devoción que hace que en diferentes puntos de Tepotzotlán se observe dicha advocación mariana, además de observar en gran parte de México actualmente se le venera.
El Bo. De la Concepción es un barrio que territorialmente pertenece a Santiago Cuautlalpan, pero algunas partes pertenecen al ejido de Cañadas de Cisneros. Su población ha incrementado a partir de la década de los ochentas y se distingue por los terrenos de riego en la parte ejidal, mismos que en verano se observan florecientes y llenos de vida. De igual forma se encuentra divido por calles, mismas en las que la familias se organizan para vivir las tradiciones, cabe destacar que tanto es así, que se organizan por familias para donar año con año una corona, el vestido y los manteles que engalanan los días de fiesta la capilla, esto es un honor para las diferentes familias que ofrendan estos detalles a la Virgen Purísima.
El domingo cuatro de diciembre este barrio se vistió de fiesta, se pudo disfrutar de banda de viento, de antojitos mexicanos y actos religiosos acostumbrados. Con procesiones por las calles, cohetes y repicar de campanas, este barrio se llenó de gala y alegría para honrar a su patrona. No faltaron los puestos de elotes, tacos de carne asada o barbacoa, típica e la región. También se disfrutaron los puestos de cazuelas de barro, alcancías y detalles para la decoración de las casas.
La capilla por su parte se observó engalanada de rosas bancas e incluso algunas fueron matizadas con el color azul, mismo que resaltaba debido a los detalles en papel con los que fue decorada la capilla en telas azules y decoración en papel blanco, colores marianos por excelencia. La Imagen de la Virgen vestida con los mismos colores, en el nicho principal del retablo, se pudo observar con los detalles propios de la temporada y que anuncian la llegada de la navidad, de igual forma estrellas que evocan el pasaje bíblico en el que se habla que aparecerá una señal prodigiosa, será la virgen con doce estrellas sobre la cabeza.
Por su parte la portada floral también aludía a la temporada; esferas de colores, en forma de noche buenas, de cisnes y un nicho principal, mismo en el que se observaba a la Virgen María. Fueron estas esferas las que hicieron y ornamentaron la entrada de la capilla, las que dieron la propiedad decembrina con la que suele anticipar esta festividad.
La fiesta se prolongó hasta el día ocho del mes, fecha en que la iglesia rinde culto litúrgico a la inmaculada concepción de María. Los pueblos vecinos como suelen acompañar, lo hicieron con las imágenes de los santos patrones, de igual forma no se dejaron de escuchar los cohetes y las campanas que anunciaban fiesta y alegría en dicha comunidad. La fiesta; como todos los años concluyo con la festividad en honor a Nuestra Señora de Guadalupe el día 12 de diciembre, día en el que la comunidad suele concluir las festividades patronales con celebraciones litúrgicas, actividades tradicionales y sobre todo con el compartir los tradicionales tamales que se ofrecen a las afuera de la capilla a los que son originarios del barrio y a visitantes.
