No vine a dar un discurso

Jun 22, 2019

El Discurso de Martha Ruíz al recibir el premio Xochitla 2019

 

#ReverdecerMéxico

Por Alberto Vega [Albar Says] para www.tepotzotlanpueblomagico.org

Martha  Ruíz corzo junto a Roberto Pedroza Muños crearon y consolidaron en 1987 el Grupo Ecológico Sierra Gorda I.A.P. Mismo que además de actividades ecológicas en la región limítrofe de Querétaro, también se ha dado a la tarea de proponer y trabajar de la mano con gobiernos federales, estatales y municipales para la recuperación de las zonas afectadas por incendios, pastoreo o directamente la mano del hombre en el territorio que compone Sierra Gorda. El 17 de junio del 2019 recibió el VI premio Xochitla, mismo que reconoce el trabajo de la sociedad civil en la investigación, preservación y difusión del cuidado del medio ambiente.

Al mediodía del sábado 15 del sexto mes del año en curso, vestida de azul y huaraches en los pies, la Sra. Martha tomo la palabra en el estrado; sin buscar hablar de la trayectoria de la IAP que representa, levantó la voz para incitar a los presentes a tomar acción frente al cambio climático.

“El Grupo Ecológico Sierra Gorda se siente honrado de tener una larga trayectoria de amistad con Xochitla. La primera vez que pise este territorio fue cuando aprendí a escribir propuestas ecológicas, hace treinta años. Ahora veo transformado a Xochitla en un solar, en una isla verde; me alegra ver su transformación en 30 años de vida. Estoy sorprendida de toda la actividad positiva que han emprendido en estos años, los árboles que han florecidos y el mantenimiento de los ecosistemas.

No voy a hablar de la trayectoria del grupo, yo vengo a decir que en 33 años no hemos dejado una posibilidad sin alcanzar, sin tocar puertas, entrevistarnos con políticos y civiles, además de meternos en mil laberintos, curvas de aprendizaje que nos han tomado hasta siete u ocho años. Ser la primera asociación con reforestaciones validadas con el Body Standards. Al mismo tiempo con el proceso de tantos años, le propuse al gobernador Calzada en Querétaro, que tropicalizáramos el protocolo de Kioto en lo local. Con ayuda del gobernador amigo y queretano de corazón, armamos un protocolo local para conseguir que se conserven los bosques al incluir pagos a los dueños de los terrenos para que los cuiden y para que no los quemen los propietarios.

¿Recuerdan México en la primavera de este año? Había 135 incendios forestales simultáneos y no se contaba con los recursos económicos para sofocarlos. Toda la estructura que operó por años, de un día para otro dejó de existir, el programa tenía huecos tremendos ¡y en ese momento México se nos quemó! En sierra gorda perdimos 3300 hectáreas de bosque, el que quiera venir es bienvenido en Querétaro, para que conozca y sienta la presencia de esos bosques.

El hombre no puede más que sentir reverencia ante esa presencia de Dios padre creador. Yo estoy totalmente apegada en la formación francisana -aunque vista de azul y algunas veces de flores-, pero para mí soy hija de la madre tierra. Hace 40 años me fui a vivir a la Sierra Gorda; encontré toda esa sabiduría y ese amor, esa abundancia y me hermané con toda esa fraternidad de la naturaleza. Todos ellos y los miembros del Grupo Ecológico Sierra Gorda sabemos que trabajamos para esa fraternidad, para que se conserve la flora y la fauna, porque eso bosques que perdimos, no los vamos a volver a recuperar.

¿Vieron cómo se llenó de tizne el país? ¿A la Ciudad de México  cómo le fue? Todo México estaba en llamas. No nos damos cuenta del valor de esos ecosistemas, todas sus funciones que tejidas por millones de años sostienen la vida, la frágil biosfera en la que tenemos para nuestro bienestar y como una madre amorosa (la naturaleza) nos mantiene. ¿Quién me puede decir el decibel de amor de un mango? ¿El chorro de comprensión en una uva o un perón? La sabiduría tejida en la naturaleza y lo perdemos porque un tonto le prendió fuego al bosque; y existen esos tontos porque nunca se castiga a ninguno. ¿Para qué queremos una PROFEPA sin dientes? En treinta años de realizar denuncias por miles no hemos conseguido meter un mandarín a la cárcel.

Situaciones muy grabes que amenazan nuestro bosque, situaciones de gobernabilidad de capacidades y con un poco de razón deberíamos cuidarlo como sagrado. La tierra es un organismo vivo no sé si lo entendamos o también si lo podamos entender que somos hijos de la tierra ¿No sé si alguno de los hombres es de pet? pero yo, montón de composta me voy a volver.

Más nos vale que despertemos estamos en un desmoronamiento global, a mí me asombra el acoso que vive el planeta, ¿Qué sombra oscura se cierne por todos lados? En Sierra Gorda con el incendio de 320 hectáreas emitimos 27 mil toneladas de carbón en números remotos, es la contribución de Querétaro al Cambio Climático. ¿Si algo no funciona? Para eso está la sociedad civil, para eso existen muchas alternativas, yo aprendí que si una puerta se cierra; la providencia me abre otras tres. ¡Los obstáculos son para darles la vuelta!

¿Yo qué sé decirles? La pertenencia, la permanencia, las olas de amor que se necesitan para tejer una gobernabilidad ciudadana con educación ecológica, una masa crítica de ciudadanos, que ya se preocupan por el relleno, por la planta de tratamiento, que busca realizar reforestaciones o hacer agricultura regenerativa. Tenemos una red de 73 micro empresas turísticas comunitarias; “La ruta del sabor”, si a ellos les va bien, ¡a mí me va mejor! Así somos un montón de mujeres que operamos “La ruta del sabor”. Equipadas con barro, un estilo característico, todos se encargan de llevar un buen estándar al manejo con todas las empresas, es un formar capacidades, es un formar de la cultura con amor, con risas, con equipamiento, con impulso gestionando las capacidades de ser buenos tejedores para el planeta, pongan en la jugada los talentos ¡que no se los van a llevar! Mi reto en esta vida está apostado a servirle al planeta, ese gusto que siento cuando a alguien de Sierra Gorda le va bien, me hace comprender que todos somos uno, y que nacimos para una convivencia de empoderamiento y crecimiento acompañado.

Creo que la abundancia es una condición de la naturaleza, cuando me bajé de los tacones y me fui a vivir a la Sierra hace cuarenta años, no sabía qué hacer con la abundancia. Pasé de contar monedas de cobre, para accesar a la abundancia. Carretillas de higos, cargas de mangos, pencas de plátanos, agua de manantial, aire de bosque, la abundancia y la riqueza de la vida simple. Cuando sales del agua fría del rio y las amigas del pueblo te comparten un huacal de mangos y disfrutas en plenitud sus sabores.

 Es momento de despertar, el planeta se nos acaba, el cambio climático es un hecho. La evidencia es diaria y cotidiana. Únicamente con mirar los mares, un minuto de silencio por esa realidad. ¡Yo no sé si en este momento tenemos mucho que celebrar!  Creo que tendría a todos que solicitarles un pensamiento de amor por el planeta. De reconocimiento de relación con él. Yo le puedo decir; Madre tierra desde el fondo de mi corazón. Tanta maravilla que me llena de vivir en el bosque y apreciar con cada neurona la magnífica belleza de la naturaleza. Aquello que podemos apreciar en los videos, en las fotografías, es lo cotidiano, sucede todos los días.

Hace años creía que a Dios lo oculta su belleza, pero al aprender a mirar la Sierra Gorda, aprendí que es un prodigio de Dios creador.

El 28 de junio en la ciudad de Querétaro se dará a conocer el modelo de reducción de emisiones de carbono, que en el estado de Querétaro está operando desde hace cuatro años. Para la regeneración del capital natural a la naturaleza, si le damos un tratamiento adecuado; sus capacidades regenerativas son asombrosas. Debemos propiciar y recuperar cada centímetro destruido por el hombre. Cada árbol es una aspiradora de dióxido de carbono, los forestales realizan fórmulas matemáticas que explican cuanto recuperan en cada área y en cada ecosistema, el trabajo de captura y almacenaje de carbón. Por eso un incendio es un drama, se liberan toneladas de carbón que estaban almacenadas por años. Un bosque viejo es como un parque almacenador de tanques de gas, esculpido por la fotosíntesis cada día. Para los ciudadanos de Querétaro les cobra 60 pesos por el canje de placas y así surgió el plan “Fondo queretano del medio ambiente”. Si sube por cilindro el cobro, pronto se contaría con mayor recursos y ese es un recurso fresco que viene a suplir las carencias ocasionadas por el Gobierno Federal, que desconozco si tendrán marcha atrás.

Yo propongo en Querétaro y en México que nos organicemos de otro modo para combatir los incendios ¿De dónde va a salir el pago a los dueños de los bosques para que no lo quemen? De ahí. Actualmente tenemos 6 mil hectáreas que están recibiendo pago para que los propietarios saquen el ganado de los bosques y permitan la regeneración reforestación. Ahí es donde viene la alegría de la vida, porque no son las reforestaciones o cultivos que tontamente hice por años. Hay 15 o 20 especies distintas de árboles en una sola hectárea y eso no se va a recuperar en una reforestación, puede pasar una plaga y no nos deja en pérdida, como nos dejó. Se les paga a los dueños para que hagan el retiro de su ganado, que necesita 16 hectáreas de bosque para ramonear, porque no son pastizales, son bosques. Esas especies se comen al roble, al encino y dejan el campo mutilado y esos bosques ya están degradados, pero si se les saca el ganado se regenera en automático.

Sierra Gorda tiene como 20 mil hectáreas más en bosque de las que tenía hace 20 años y se regeneraron solamente con el retiro del ganado. Yo ya me olvidé de reforestar 6 millones de árboles, nos tomó 25 años de vida. Desafortunadamente cuando vino la plaga del descortezador plago a la mitad de aquellos que fueron sembrados en toda una vida. Esas son las curvas de aprendizaje. Si sacas el ganado, lo circulas y con las semillas de los arboles padre y las semillas que ya se encuentran en el suelo, entonces ocurre la maravilla de la vida.

Quiero propiciar una enérgica participación de la población rural un colectivo rural capturando dióxido de carbono y agua  en los bosques con retiro de ganado y suelos bajo pastoreo plantificado.  El ganado en un  establo son nocivas para el medio ambiente, pero en pastoreo planificado son una maquinaria ecológica increíble. Ahí dejan todo fertilizado, todo podado y con las lluvia, las semillas de pastos que ni el hombre recordaba, reverdecen. Cada año que se aprende a utilizar el tiempo, va sucediendo un milagro increíble.

En Chihuahua el rancho más exitoso, creo que en México, ese señor mete 1200 vacas a pastoreo por hectárea y las mueve cada hora, ese simple acto sorprende porque toda la tierra quedó fertilizada, removida, podada, es una maravilla. El ingenio al frente del Rancho Carretas duplicó el número de cabezas de ganado en 3 años de pastoreo. Dice que es como tener dos ranchos en uno. Yo veo en Sierra Gorda como esos pastos se van cerrando, van agarrando vigor. Esas raíces, son puro dióxido de carbono. Por un centímetro de humus que se desarrolla, se está capturando 144 mil litros de agua, allá Querétaro, los pastizales que ya tienen ese manejo van para arriba y siente la fuerza de la naturaleza. Estamos haciendo esponjas utilizando las vaquitas como un equipo de regeneración de suelo, es increíble.  Así se obtiene lanita fresca, por cobro de pequeñitos impuestos de carbono capturado. A nivel de estado, a ideal nacional, ante el retroceso que estamos viviendo, hay que activar a los gobernadores, en otro sentido. Ahí hay un nicho de oportunidad, ahí puede ser validado un protocolo como el que acaba de ser validado y que acaba de ser reconocido por naciones unidas, para desarrollar una metodología de como cuantificar, la regeneración de oxígeno y captura de dióxido de carbono en suelos con prácticas alternativas, bosques con retiro de ganado, acción de gobiernos sub nacionales, no gubernamentales, con estándares globales de WFME. Pero este protocolo es para gobernadores, para homologar la metodología para que ellos puedan homologar la reducción y su plan y compromiso que México asumió al firmar el Acuerdo de París.

 

Así que hoy día tenemos una metodología para suelos, facilitada en el contexto de los dueños de la tierra, que no tienen IFE, no Curp, no tienen tenencia de la tierra. Así que lo que nos ha funcionado en Querétaro es tropicalizar el protocolo de Kioto, además de incluir siete estado del país. El 28 de junio tendremos el lanzamiento del modelo, para que otros gobernadores del país lo incluyan; ya estuve con el gobernador de Aguascalientes, de Chihuahua, Nuevo León y se dan cuenta que recuperan productividad y se están acomodando a otra realidad con el cambio climático, una medida de adaptación, si se tiene el agua con diseño hidrológico y las raíces como una esponja ahí está la adaptación al cambio climático.

Yo solamente quiero platicar esa idea la tenemos registrada ante Naciones Unidas, esa medida nacionalmente apropiada. Que sintetiza el aprendizaje de 33 años consolidados y que acaba de ser validado y que ahora yo propongo otra fiesta dentro de diez años; ¡porque ahora la tarea es reverdecer México! De Baja California a Yucatán. Tenemos las herramientas, tenemos las estrategias, la metodología y el que se quiera unir a reverdecer pastizales y bosques y a generar riqueza para la gente local que recibe su cheque por capturar carbono, esa es la economía de la conservación.

Este reconocimiento es para muchos, para todos aquellos con los que hemos caminado, pero yo sé que es un galardón para todos los compañeros del equipo, para todos los participantes, en los proyectos, porque el equipo de sierra gorda, es muy amplio y nuestra red de amigos es lo más valioso que hemos tejido y así es como avanzamos, tenemos de frente ese reto y tenemos el corazón lleno de pasión y de urgencia.

“¿Quién dijo que todo está perdido?
¡Yo vengo a entregar mi corazón!”

Es el momento de generar, honesto, el cerebro hay que dejarlo pensar, hay que dejarlo actuar, un excelente consejero,  no todo lo que relumbra es oro, así que un exhorto por la medre tierra.

“¡Unidos en la lucha no nos moverán!
Que van los corazones valerosos, una ola de amor para la madre tierra, eso pido”.

Gracias